Este es un espacio para difundir noticias y actividades que los vecinos autoconvocados, en conjunto con agrupaciones sociales, ambientalistas y políticas, realizamos a fin de defender, preservar, y recuperar para toda la comunidad la ribera de Avellaneda y Quilmes.
Mucho frío, pero ahí estábamos, domingo 5 de junio de 2011, 10 de la mañana, Espora y Caseros bajada de la autopista, pocos que después fuimos mas, viejos conocidos y nuevos por conocer, pero ahí estábamos, ese pequeño pero Gran grupo de unos 20, 25 o 30 , que mas da, con frío, pero con convicción, algunos con pocos años otros con muchos, pero las mismas ganas. Y nos pusimos en marcha nomás, iniciando la caminata, caminata simple en su realización pero compleja y noble en sus intenciones, caminata con forma de paseo instructivo y al mismo tiempo de lucha, lucha para salvar a lo que la ciencia y estudiosos llaman selva marginal y humedal, pero que el resto de los humildes mortales como yo, simplemente llamamos “bañado” y “monte”. Y ahí estaba, con Vicky , Ceci y Mi Viejo junto a un grupo de desconocidos hasta ese momento, pero que al instante nos integraron sin mas tramite que un saludo y/o un beso o apretón de manos, y ya estaba, ya éramos parte, con esos simples actos quedaba sellado el “contrato”. Desconocidos que a primera vista pueden parecer improvisados, desordenados, utópicos, pero que con el correr de los minutos nos iban mostrando que conocen el tema, que investigaron e investigan, que estudiaron y estudian , que enseñan, que luchan, que se comprometen, pero sobre todas las cosas , aman lo que hacen, y por consiguiente al “bañado”, al “monte” y a su “gente” . Y ahí estaba yo, si yo, que hace poco mas de 30 años recorría esos lares y los conocía como la palma de la mano mucho antes que los mas jóvenes del grupo hubiera nacido o sabido que es un “bañado”, yo que en busca de acercarme a una presa de caza, me paseaba entre lirios y totoras, con el agua a la cintura de estos hermosos bañados. Yo que vi los “lagartos” (overos ) VIVOS!, en el mismo sendero, con su puente y su tala que les servia de madriguera, donde ahora encontraron sus cuerpos sin vida, y que a manera de homenaje, pusieron su nombre al sendero y los recuerdan con un letrero. Puedo decir sin temor a equivocarme que en esa selva enmarañada y fangosos humedales he pasado algunos de los mejores momentos de mi infancia junto a mi querido Quito, mi abuelo, “animal de bañado y monte” si los hubo, el fue quien me enseño a querer y respetar estos parajes con su infinita variedad de plantas y animales y también a conocer todos sus secretos. Quito, que conoció la selva cando se extendía sin interrupciones por todo lo largo de la costa. Ay Quito que suerte que ya no estas, para ver como la mano mezquina avara y codiciosa de el hombre, de algunos hombres, erigió “colinas” de basura y tierra sobre “nuestro”, con nuestro quiero decir de todos, querido bañado. Pero acá estoy Quito, junto a Vicky mostrándole y enseñándole lo que vos me enseñaste y mostraste en el pasado, junto a Ceci y Papa y este puñado de Quijotes que con amor y convicción, con ideales e ideas, con fuerza y perseverancia , pero sin violencia ni prepotencia, han comenzado esta cruzada para proteger y salvar este hermoso y necesario ecosistema, sin olvidar a el grupo de “Ribereños” que, políticos corruptos, si olvidan, condenándolos a la marginalidad y la miseria, Quijotes que instruyen, divierten, organizan y crean conciencia en estos humildes pero nobles pobladores de la ribera. Caminando entre sus casas vi como nos recibían y saludaban con afecto, con agradecimiento por devolverles La Plaza, por las actividades para los chicos y también los grandes, por……. no olvidarlos y no condenarlos a la exclusión. También escuche como algunos nos pedían que “ no aflojemos”, como aflojar luego de verlos , escucharlos y sentirlos? Por mi parte imposible. Aquí estoy en “ Mi Primera Caminata”, que por la memoria de mi querido abuelo Quito y el futuro de Vicky ( mi hija), juro que no será la ultima. Para finalizar sepan disculpar los “horrores” de redacción y otras “yerbas” que seguro he cometido, solo pido que simplemente lo tomen como la crónica de lo vivido y en agradecimiento por dejarnos ser parte “ de”.
Pequeño Gran Grupo
ResponderEliminarMucho frío, pero ahí estábamos, domingo 5 de junio de 2011, 10 de la mañana, Espora y Caseros bajada de la autopista, pocos que después fuimos mas, viejos conocidos y nuevos por conocer, pero ahí estábamos, ese pequeño pero Gran grupo de unos 20, 25 o 30 , que mas da, con frío, pero con convicción, algunos con pocos años otros con muchos, pero las mismas ganas. Y nos pusimos en marcha nomás, iniciando la caminata, caminata simple en su realización pero compleja y noble en sus intenciones, caminata con forma de paseo instructivo y al mismo tiempo de lucha, lucha para salvar a lo que la ciencia y estudiosos llaman selva marginal y humedal, pero que el resto de los humildes mortales como yo, simplemente llamamos “bañado” y “monte”. Y ahí estaba, con Vicky , Ceci y Mi Viejo junto a un grupo de desconocidos hasta ese momento, pero que al instante nos integraron sin mas tramite que un saludo y/o un beso o apretón de manos, y ya estaba, ya éramos parte, con esos simples actos quedaba sellado el “contrato”. Desconocidos que a primera vista pueden parecer improvisados, desordenados, utópicos, pero que con el correr de los minutos nos iban mostrando que conocen el tema, que investigaron e investigan, que estudiaron y estudian , que enseñan, que luchan, que se comprometen, pero sobre todas las cosas , aman lo que hacen, y por consiguiente al “bañado”, al “monte” y a su “gente” . Y ahí estaba yo, si yo, que hace poco mas de 30 años recorría esos lares y los conocía como la palma de la mano mucho antes que los mas jóvenes del grupo hubiera nacido o sabido que es un “bañado”, yo que en busca de acercarme a una presa de caza, me paseaba entre lirios y totoras, con el agua a la cintura de estos hermosos bañados. Yo que vi los “lagartos” (overos ) VIVOS!, en el mismo sendero, con su puente y su tala que les servia de madriguera, donde ahora encontraron sus cuerpos sin vida, y que a manera de homenaje, pusieron su nombre al sendero y los recuerdan con un letrero. Puedo decir sin temor a equivocarme que en esa selva enmarañada y fangosos humedales he pasado algunos de los mejores momentos de mi infancia junto a mi querido Quito, mi abuelo, “animal de bañado y monte” si los hubo, el fue quien me enseño a querer y respetar estos parajes con su infinita variedad de plantas y animales y también a conocer todos sus secretos. Quito, que conoció la selva cando se extendía sin interrupciones por todo lo largo de la costa. Ay Quito que suerte que ya no estas, para ver como la mano mezquina avara y codiciosa de el hombre, de algunos hombres, erigió “colinas” de basura y tierra sobre “nuestro”, con nuestro quiero decir de todos, querido bañado. Pero acá estoy Quito, junto a Vicky mostrándole y enseñándole lo que vos me enseñaste y mostraste en el pasado, junto a Ceci y Papa y este puñado de Quijotes que con amor y convicción, con ideales e ideas, con fuerza y perseverancia , pero sin violencia ni prepotencia, han comenzado esta cruzada para proteger y salvar este hermoso y necesario ecosistema, sin olvidar a el grupo de “Ribereños” que, políticos corruptos, si olvidan, condenándolos a la marginalidad y la miseria, Quijotes que instruyen, divierten, organizan y crean conciencia en estos humildes pero nobles pobladores de la ribera. Caminando entre sus casas vi como nos recibían y saludaban con afecto, con agradecimiento por devolverles La Plaza, por las actividades para los chicos y también los grandes, por……. no olvidarlos y no condenarlos a la exclusión. También escuche como algunos nos pedían que “ no aflojemos”, como aflojar luego de verlos , escucharlos y sentirlos? Por mi parte imposible. Aquí estoy en “ Mi Primera Caminata”, que por la memoria de mi querido abuelo Quito y el futuro de Vicky ( mi hija), juro que no será la ultima.
Para finalizar sepan disculpar los “horrores” de redacción y otras “yerbas” que seguro he cometido, solo pido que simplemente lo tomen como la crónica de lo vivido y en agradecimiento por dejarnos ser parte “ de”.
Un abrazo,
Gustavo Gil